Crónicas del camino

Simón, el hombre de los mil oficios

Después de salir de su Cali natal y cruzar por Pereira, Simón Araújo soltó su ancla en Urabá, para sentar cabeza, dedicarse a su mujer, sus dos hijas y trabajar que es lo único que sabe hacer, ya que labora los siete días de la semana, en horarios forzados.

Simón no tiene tiempo para el ocio, para aburrirse, ni para los malos pensamientos, se levanta de lunes a viernes a las cuatro y treinta de la mañana para acudir a su jornada laboral en la finca La Florida de Carepa, Antioquia, de la empresa C.I Banafruit, de donde regresa pasadas las siete de la noche.

Allí cumple un sin número de actividades que van desde embolsador, empacador, paletizador, desmachador, pesador, seleccionador, cartonero, desmanador, deshojador hasta abonador (todas estas labores están relacionadas con el cultivo del banano). Simón lleva ocho años en Urabá, cinco de ellos vinculado con esta finca.

Pero este hombre inquieto, de mente despejada y activa, sabe que sus hijas, Yesica Bibiana de 10 años y Luisa Fernanda de 12 están creciendo, que cada día exigen más para sus estudios y que el trabajo en la finca bananera, no está prometedor como en otros tiempos, ya que el gremio salta de crisis en crisis y los pagos no alcanzan para el sostenimiento digno del hogar, lo que lo ha llevado a combinar su trabajo de obrero bananero con otra serie de actividades.

Por ejemplo, Simón es pintor de estructuras y casas, es ebanista, aplica estuco, Graniplax y se le mide al trabajo de la construcción sobre todo en aspectos de mampostería.

En su taller del barrio Santillana de Carepa, este artesano pone a volar su imaginación.
El arte está en perfeccionar hasta los más mínimos detalles.


No contento con lo anterior, este trabajador incansable es un excelente artesano, un fabricador de sueños e ilusiones permanentes. Construye a escala: helicópteros, aviones, camiones, buses, escaleras, chivas, navíos y transatlánticos, afición que adquirió en su paso por la Armada Nacional y su contacto con barcos y otro tipo de navíos, empleando para ello madera y pegamentos especialmente.

Este artesano construye con impresionante realismo y perfección todos estos aparatos y les acondiciona luces, camarotes, comedores, cuartos de máquinas, velas, botes salvavidas y toda la parafernalia que lucen en los aires o en los mares, haciéndolos ver tan auténticos y fantásticos como si uno estuviese observando un mundo real.

Simón está en condiciones de hacer realidad el sueño de los niños y hasta de los adultos, quienes más se impresionan con sus creaciones. Hoy tiene dos proyectos trazados en su imaginación y tarde que temprano los llevará a la realidad. Quiere construir una cocina integral y un transatlántico de metro y medio de eslora.

A todo lo anterior se suma, que ya ha involucrado a su señora esposa, Blanca Iris León Ortiz, en sus actividades y ahora, juntos están elaborando jarrones de papel, los cuales Simón exhibe orgulloso, como un trofeo ganado en familia.

En su paso por Pereira, la ciudad de las puertas abiertas, Simón construyó una réplica del centro de la capital del Risaralda, con edificios, calles, avenidas, zonas verdes y peatonales, la cual medía tres metros, la misma que vendió rápidamente.

La obra de este acucioso artesano, es más conocida en Turbo que en Carepa, sobre todo sus barcos, y él atribuye esto a la cercanía con el mar, lo que hace su trabajo más atractivo, además que las limitaciones económicas de las personas de Carepa, no ayudan mucho para que le compren su trabajo, a pesar de no ser costoso.

Se podrá decir sin dudarlo, al hablar de un hombre dinámico, creativo y modesto, que ese es Simón Araujo, el hombre de los mil oficios, quien combina todas las formas de lucha, pero para trabajar honradamente y sentirse orgulloso de sus hijas y de su mujer, por quienes realiza todo este esfuerzo, sin quejarse un solo momento. Simón siempre está alegre y expresivo como sus barcos, sus aviones o sus helicópteros.

Las personas o instituciones interesadas en contactarse con este señor, lo pueden hacer a los teléfonos: 300 813 7696 ó 300 813 8233.