domingo, 11 de mayo de 2014

Una década de periodismo responsable



Durante este mes de mayo, EL PREGONERO DEL DARIÉN, cumple una década al servicio de Urabá, como un aporte más, a las diferentes opciones periodísticas que circulan en la zona. Logramos ser tan distintos, que ni somos competencia de ellos ni ellos son la nuestra.



Nacimos justamente un tres de mayo, una emblemática fecha, Día Mundial de la Libertad de Prensa, hoy airosos celebramos con ustedes nuestros lectores, anunciantes, columnistas y demás colaboradores, una década de circulación, navegando siempre en un mar de dificultades, pero con la brújula bien puesta, convencidos de lo que estamos haciendo, de lo espinoso que es el camino que recorremos en nuestro andar periodístico, sobre todo cuando no utilizamos, ni la lambonería, ni la lisonja, ni mucho menos el chantaje o la extorsión, para conseguir un anuncio publicitario. Por el contrario, nos hemos dado el lujo de rechazarlos cuando conocemos las intenciones perversas de quienes los ofrecen.

Hemos, logrado fortalecer el periodismo de opinión, un término exótico, hace diez años en Urabá, al igual que defender amplios espacios de libertad e independencia, de igual forma incursionamos en géneros periodísticos, como la cónica, la entrevista y el reportaje, la investigación y el análisis de la noticia, herramientas con las cuales nos fuimos consolidando en la región.

Tampoco hemos desfallecido en la difusión y apoyo incondicional a todas las expresiones culturales tan abundantes en este territorio y demostramos con hechos que la cultura, tan esquiva sobre todo para tantos gobernantes, no era la cenicienta como le llamaban, al menos para nosotros. Eso también extendió lazo entre el medio y los cultores de Urabá, hoy indisolubles.

Si bien, hay quienes nos quieren ver llegar con rodilleras a sus despachos para hacer fila, a mendigar un aviso; quienes nos quieren someter a sus mezquinos intereses personales y de turno, tampoco lo han logrado en esta década de luchas desiguales, frente al poder económico y político.

También han habido y los hay soñando, con ver nuestro periódico cerrado, y su director encarcelado, tampoco han tenido ese gusto, ellos no entienden que el lastre de la corrupción, los enormes problemas sociales de Urabá, no los generamos nosotros, escasamente somos testigos casi mudos, al lado de todos estos hechos y frente a unas autoridades alcahuetas, cómplices y descompuestas, que en vez de cumplir con sus deberes, obligaciones legales y constitucionales, más bien se dedican a tapar, callar y favorecer a los responsables de tamaños despropósitos.

El periodismo nacional cruza una crisis sin precedentes, y peor el de Urabá, nos hemos convertido en mandaderos oficiales por unos cuantos pesos, replicadores de boletines acomodados y mentirosos, por la paga, o por simple pereza de acudir a las verdaderas fuentes, no investigamos y publicamos irresponsablemente lo que nos llega a las manos, sin el menor rigor, como lo afirmara en días pasados el veterano periodista, Javier Darío Restrepo. La presente edición DEL PREGONERO DEL DARIÉN, trae varias reflexiones sobre periodismo, dirigidas no solamente al gremio, sino a la sociedad en general .Ojalá caigan en tierra abonada y den sus frutos.

Finalmente, infinitas gracias a todas las personas que por diferentes medios, redes sociales, correos electrónicos, de manera personal o vía telefónica, nos han expresado sus mensajes de felicitación y congratulaciones por nuestro aniversario número diez. ¡Salud a todos y todas!

A: Aleyda, Natalia, Wilmar Jr, y Giovanni, fundadores de este periódico, decirles que la llama de libertad e independencia que avivaron hace una década, está hoy más encendida y resplandeciente que nunca.